Obviamente ya sabés que en el contexto económico que vivimos ahorrar es difícil, y guardar los billetes debajo del colchón no es una opción muy rentable que digamos. Perdón, nos retractamos: para nada rentable y mucho menos segura. Por eso, la inversión aparece como una alternativa más que atractiva para hacer que nuestra plata rinda un poco más o -al menos- no se devalúe tanto. Y entre las posibilidades para hacerlo, están las obligaciones negociables.
Sí, eso mismo: obligaciones negociables. Si nunca oíste hablar de este tipo de inversión, podríamos decir que son una especie de bonos que te pagan intereses determinados y, según dónde inviertas, hasta una renta fija en dólares. Epa, ¿te va interesando? Entonces tenete a mano el test del inversor para refrescar cuál es tu perfil, y dale no más con la lectura que el saber no ocupa lugar.
¿Qué son las obligaciones negociables?
Las obligaciones negociables en Argentina son instrumentos de deuda de renta fija emitidos por empresas -o títulos de deuda emitidos por privados-, que suponen un riesgo moderado de inversión. Se trata de un préstamo que toman las compañías o -más bien- una especie de búsqueda de inversiones.
A través de este instrumento, las empresas piden plata prestada -financian su deuda a través de bonos o títulos- y, a cambio, se comprometen a pagar un cierto interés por sobre el costo del préstamo. Y existen tanto obligaciones negociables en dólares como en pesos.
En Argentina existen diferentes tipos de bonos privados, como los CER que ajustan por el Coeficiente de Estabilización de Referencia, o sea por evolución de la inflación.
Damián Di Pace, periodista especializado en economía
Ojo, que uno de los errores al invertir es no contemplar los riesgos que implica el uso de determinado instrumento. En este caso, hay que destacar que las obligaciones negociables se operan a través del mercado de capitales, y que las condiciones de emisión pueden variar de un actor a otro, si bien están especificadas en el prospecto de emisión que se sube a la web de la Comisión Nacional de Valores (CNV).
Hay obligaciones negociables que están atadas al dólar y se denominan dolar linked. Reportan interés si el dólar sube.
Damián Di Pace
Asimismo, estos instrumentos tienen un interés predefinido al momento de la licitación -es decir, cuando se emiten los bonos-, y esto es lo que hace que el pago de intereses sea una renta fija. Además, hay dos tipos principales de obligaciones negociables: las simples, que representan la relación deudor-acreedor y suponen un compromiso común de pago. y las convertibles, que le dan al inversor la posibilidad de canjear su tenencia de bonos por acciones de la compañía que los haya emitido.
Ventajas y desventajas de las obligaciones negociables en 2023
Como toda inversión, hay pros y contras que evaluar antes de tirarse a la pileta. Así, entre las ventajas está el hecho de que podemos encontrar bonos muy seguros, admitidos por empresas rentables del país y, además, de varios tipos. En este sentido, algunos de las obligaciones negociables ejemplos son: Dollar-linked, UVA, Hard-Dollar, tasa fija y tasa variable. Perfecto para los diferentes tipos de inversores.
Incluso las PyMEs cuentan con un régimen simplificado de oferta pública y cotización, y sus obligaciones negociables suelen ser muy elegidas en Argentina, aunque en algunos casos solo tienen acceso los inversores calificados, debido al nivel de riesgo que supone apostar por una empresa pequeña o sin garantía suficiente.
Otra ventaja ciertamente está en el hecho de que el pago de intereses sea de renta fija, por lo que más o menos siempre sabrás cuándo y cuánto vas a cobrar por la inversión, y calcular así la rentabilidad esperada, algo que contribuye a reducir la volatilidad y el riesgo.
Eso sí, en contrapartida es posible encontrar títulos con baja liquidez, por lo que hay que saber muy bien qué posibilidades tenemos al momento de invertir.
También, entre otros riesgos están los factores que pueden alterar los fondos que reciben los inversores. Después de todo, no hay que olvidarse que esta no deja de ser una inversión. Alguno de estos elementos pueden ser un cambio normativo que imposibilite a la empresa acceder a la plata para afrontar la deuda, o que la compañía cierre y no pueda pagar los bonos, aunque es muy poco probable que esto pase.
Algunas de las obligaciones negociables recomendadas
Obviamente, antes de invertir es necesario investigar seriamente cada opción, pero acá podemos darte algunas opciones que los expertos ven con buenos ojos. Quizás eso te ayude a reducir el amplio universo de obligaciones negociables.
- Hard Dollar por ley extranjera: son ideales para los inversores más conservadores y que buscan el menor riesgo posible; y entre ellas destacan Telecom, Arcor, YPF, IRSA y Genneia, con vencimientos entre 2023 y 2026, que pueden alcanzar un rendimiento de alrededor del 13%.
- Hard Dollar por ley local: son solo para instituciones que acceden al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC). Entre estas opciones destacan Cresud a 2026 (CS380), que abona dólares cable y cuenta con un rendimiento del 8% anual en dos cuotas semestrales.
Si estás buscando en qué invertir tus pesos o tus dólares sin arriesgarte demasiado, las obligaciones negociables pueden ser un gran alternativa. Obviamente, lo mejor es que siempre leas mucho e investigues antes de lanzarte a invertir, porque puede ser también que encuentres otras opciones más acordes a tus expectativas.
Por suerte, acá te hacemos el aguante para resolver algunas de tus dudas. Prepará el mate o tereré, y… ¡Hablemos de plata!